Los fabricantes de inhibidores de la bomba de protones AcipHex (rabeprazon sódico) ofrecen aliviar efectivamente los síntomas de la enfermedad del reflujo ácido, acidez y condiciones relacionadas. Si bien AcipHex ayuda en el tratamiento de ciertas condiciones médicas relacionadas con el ácido estomacal, no logra hacerlo sin la posibilidad de causar efectos secundarios y complicaciones. Si usted, o alguien cercano a usted, fue perjudicado por AcipHex, rabeprazol sódico, o cualquier otro IPB, usted podría tener fundamentos para presentar una demanda de responsabilidad del fabricante. Si desea saber más sobre cuáles son sus derechos legales, es una buena idea contactar a un abogado focalizado en el área farmacéutica que tenga experiencia en este tipo de casos. Los asertivos abogados de Moll Law Group, que cuentan con conocimientos sobre AcipHex, han manejado una importante cantidad de demandas de responsabilidad del fabricante. Hemos estado involucrados en muchos casos en los que se han recuperado miles de millones de dólares.
AcipHex es fabricado por Eisai, una compañía farmacéutica mundial con sede principal en Tokio, Japón. Como otros gigantes del sector, Eisai tiene miles de empleados y sus ingresos son de miles de millones. AcipHex se prescribe con más frecuencia para tratar condiciones como ulceras duodenales, enfermedad del reflujo gastroesofágico (ERGE), acidez, condiciones hipersecretoras patológicas, síndrome de Zollinger-Ellison y otras dolencias derivadas del consumo de ciertos alimentos. En algunos pacientes, puede causar efectos menores como estreñimiento, diarrea, dolores de cabeza y nauseas. Y aunque ninguno de estos efectos probablemente cause daños permanentes, estudios recientes indican que este medicamento puede causar otras complicaciones más serias. Entre las posibles lesiones a largo plazo se pueden incluir enfermedades renales, ataques al corazón y demencia.
Las personas que han sufrido lesiones por un producto defectuoso, incluyendo a consumidores que hayan sufrido complicaciones a causa de AcipHex u otro IPB, tienen derecho a ser indemnizados por parte de aquellos responsables. Las demandas de responsabilidad del fabricante se pueden fundamentar en una o más causas de acción como: negligencia, responsabilidad objetiva e incumplimiento de garantías. Por ejemplo, una demanda por incumplimiento de garantías requiere la existencia de una relación contractual entre el demandante y el demandado, mientras que una demanda por negligencia no requiere la prueba de una relación contractual. Sin embargo, el demandante en un litigio por negligencia, necesita probar que el demandado incumplió con su obligación de protección al consumidor y este incumplimiento causó una lesión al demandante. Ningún requisito de incumplimiento se aplica a las demandas de responsabilidad objetiva, las cuales se fundamentan en demostrar que un defecto de fabricación, diseño o comercialización lesionó directamente a la víctima.
Entre los tipos de indemnización que con mayor frecuencia reciben los demandantes exitosos en los casos de los inhibidores de la bomba de protones incluyen: gastos médicos, dolor y sufrimiento, lucro cesante, pérdida conyugal y discapacidad. Algunas veces los consumidores mueren trágicamente a causa de las complicaciones causadas por uno de estos medicamentos peligrosos. Cuando esto sucede, los miembros de la familia de la víctima pueden presentar una demanda por muerte causada por negligencia y lograr una indemnización acorde a su relación con la víctima. En algunos casos, también se puede lograr el pago de daños punitivos por parte de los demandados que han actuado en una forma particularmente notoria.
Si usted o un ser querido, sufrió una grave enfermedad luego de tomar AcipHex u otro IPB, debe hablar con un abogado sobre la posibilidad de presentar una demanda en contra de cualquiera de las partes responsables por sus lesiones. Los abogados en Moll Law Group con experiencia en casos de AcipHex, están aquí para guiarlo en el proceso legal. Llámenos al (312) 462-1700 o contáctenos en línea al para programar una evaluación gratuita y confidencial con un abogado experimentado en casos de los inhibidores de la bomba de protones. Asistimos a los consumidores que han sufrido lesiones a lo largo de los Estados Unidos, incluyendo California, Texas, Florida, Michigan, Nueva York y Pensilvania.